(Toda la obra es un largo monólogo interior en primera persona, y en muchos aspectos es autobiográfica) las intensas sensaciones tras saborearla junto a un té caliente, la humilde Magdalena no hubiera pasado de ser un dulce local, más bien seco y sin mucho brillo, y posiblemente hubiera pasado inadvertida para el resto de los mortales ¡Qué horror, lo que nos hubiéramos perdido!
Allí donde estés, mil gracias Marcel
¡Aay, (suspiro) la Magdalena de Proust!
"Tan pronto como el líquido caliente mezclado con las migajs del bollo tocó mi paladar, me estremecí, fija mi atención en algo extraordinario que ocurría en mi interior. Un placer delicioso me invadió, me aisló, sin noción de lo que lo causaba y convirtió las visicitudes de la vida en indiferentes, sus desastres en inofensivos y su brevedad en ilusoria, todo del mismo modo que opera el amor, llenándose de una esencia preciosa (...) Dejé de sentirme mediocre, contingente y mortal ¿De dónde podría venirme aquella alegría tan fuerte? Me daba cuenta de que iba unida al sabor del té y del bollo, pero le excedía en mucho, y no debía de ser de la misma naturaleza. ¿De dónde venía y qué significaba? (...)
Y de pronto el recuerdo surge. Ese sabor es el que tenía el pedazo de magdalena que mi tía Leoncia me ofrecía después de mojado en su infusión de té o tila, los domingos por la mañana en Combray cuando iba a darle los buenos días a su cuarto[…]
Cuando nada subsiste ya de un pasado antiguo, cuando han muerto los seres y se han derrumbado las cosas, solos, más frágiles, más vivos, más inmateriales, más persistentes y más fieles que nunca, el olor y el sabor perduran mucho más, y recuerdan, y aguardan, y esperan, sobre las ruinas de todo, y soportan sin doblegarse en su impalpable gotita, el edificio enorme del recuerdo."
Verdades eternas... los momentos del pasado y el presente con una realidad igual, tienen la capacidad de revelar la memoria enterrada que de pronto se libera ante un acontecimiento cotidiano.Estadísticas: Publicado por Izaskun — Vie 08 Ago, 2014 16:59
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