Hola a todos ¿qué tal?
Qué duro es intentar asimilar que ya no puedes comer pan de verdad… Qué voy a contaros…
Llevo desde Enero en la dura batalla de la alquimia intentando hacer algo que se asemeje al pan, el horno no lo domino ni en broma, cien mil fracasos, así que decidí comprar una panificadora (Bomann CB 594) en un intento desesperado.
He hecho varios intentos… todos directamente al cubo de la basura (mi problema, entre otros, es alergia al trigo, cebada, centeno, avena, maíz, arroz y proteínas de la leche, entre otras… y lo que vaya saliendo por añadidura) pero ayer conseguí una aproximación bastante decente, para mí. Esta es la mezcla:
SÓLIDOS: - 125 gramos de almidón de patata. - 50 gramos de harina de mandioca. - 175 gramos de harina integral de mijo. - 75 gramos de harina integral de trigo sarraceno. - 75 gramos de harina de quínoa. - 1 cucharadita de azúcar. - ½ cucharadita de sal (soy bastante soso). - 1 cucharada de psyllium. - 2,5 gramos de levadura seca.
LÍQUIDOS: - 200 gramos de leche de soja. - 1 huevo entero, que, aproximadamente, pesó unos 50 gramos. - Agua, hasta completar los 500 gramos, unos 250 gramos restantes. - 1 cucharada de aceite de oliva. - 1 cucharada de limón.
Programa nº 2 de esta panificadora, SCHNELL (Rápido) que tiene una duración de 1 hora y 58 minutos: 5 minutos de calentamiento, 27 minutos de amasado/ablandamiento de la masa, 32 minutos de fermentación y 55 minutos de cocción, yo le añadí otros 20 minutos más por si acaso (harto ya de tirar piezas para edificación a media cocción).
Elegí este programa porque en otras pruebas fallidas con otros programas más largos, que tienen tres periodos de fermentación, la mezcla sube un montón pero luego, al comenzar la cocción, pegan el bajón y quedan engendros con forma de barca.
Después del amasado/ablandamiento, la mezcla dobló su volumen y durante la cocción no bajó nada, ni por el centro… ¡Sorpresa!... No tengo fotos para enseñaros a la criatura, pero tiene buena pinta, es el primero que me sale así de bien (digo bien, a la ligera, porque los anteriores fueron un desastre).
Esta mañana, ya frío, lo he abierto… no mancha el cuchillo. Tiene un puntillo de humedad, creo que lo normal, la miga es más esponjosa desde la mitad hacia arriba, más alveolada. De la mitad hacia abajo es un poco más denso, menos alveolado. No me resulta demasiado gomoso.
El resultado sigue sin saber a pan de verdad, lógicamente, pero, aunque un poco soso, no me parece que el sabor sea malo, creí que el sarraceno iba a dominar más, pero no destaca sobre ninguno… me ha resultado comestible, no acabará en el cubo de la basura.
Creo que esta mezcla puede resultar menos densa si no utilizo la leche de soja, o el huevo, no sé. Desconozco también si el psyllium influye en el grado de humedad final, o la leche de soja y el huevo aportan lo suyo, ya me contaréis.
Voy a seguir con ella haciendo pequeñas modificaciones cada vez y ver por dónde tira el asunto e incluir alguna leguminosa.
Si podéis hacer alguna sugerencia o consejo será una bendición para este testarudo y eterno aprendiz.
Un saludo.
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