Claro, como comenta Cecilia, cada cual puede aplicar la técnica de amasado que mejor le convenga o con la que se sienta más cómodo.
Hay veces que por cantidad de masa o por consistencia no puedes amasar como propone Richard Bertinet y en general los franceses (cuyo objeto no es "darle tunda a la masa" sino estirarla para aportar aire y vida a la misma -el prefiere de hecho hablar no de "amasar", que le suena muy duro, sino de "trabajar la masa") y tienes que recurrir a estiramientos y pliegues seguidos de reposos o a la técnica de los amasados cortos de Dan Lepard, por ejemplo (imagínate con 10 kg de masa y sin amasadora).
Aunque quizás éstas últimas técnicas van mejor durante fermentaciones largas (por ejemplo usando masa madre), ya que los reposos pueden ser largos y el gluten puede desarrollarse bien sin riesgo de sobrefermentación. Si usas levadura, sobre todo en método directo (sin prefermentos), los tiempos son muy reducidos y quizá venga mejor amasar de seguido 10/15 min (aunque ya digo que no siempre y no necesariamente), dependiendo de la consistencia a lo Bertinet, o con el amasado inglés, o con la técnica que se prefiera adaptada a lo que a cada uno le convenga, sabiendo que el objetivo es desarrollar el gluten (con harinas de trigo, claro).
Salvo casos muy concretos y sobre todo si hablamos de harinas de trigo, el amasar de una forma o de otra no suele influir en el tipo de recetas que se pueden hacer.
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